jueves, 30 de julio de 2020

el "maldito" privilegio blanco

Blanco en blanco de Kazimir Malevich, 1918


alFredoTriFf

La idea espuria de hoy tiene que ver con el privilegio. 

Privilegio es, de acuerdo al diccionario, una "ventaja especial exclusiva que se disfruta", no por derecho propio, sino "por concesión", o prebenda, generalmente inmerecida. A propósito, la palabra es usada tan temprano como 1961, por Fidel Castro, contra la burguesía criolla cubana: 
Se sabe que las revoluciones entrañan destrucción de privilegios y de intereses de minorías explotadoras, para servir los intereses, y los derechos, y las aspiraciones de las grandes mayorías oprimidas o explotadas (APLAUSOS). Vamos a apartarnos de esas enumeraciones, y vamos a afirmar y a analizar que era inevitable un choque de intereses, que era inevitable el choque entre los intereses de la mayoría y los intereses de la minoría privilegiada.
Desde la Revolución Francesa, el "privilegio" (el tan condenado privilège pregonado por los líderes jacobinos) se arrima al siglo XX con la famosa consigna: "la explotación del hombre por el hombre". ¿La recuerdan? 

El asunto vuelve con nueva fuerza en 2020 con el llamado privilegio blanco

Según Peggy McIntosh, los blancos en sociedades occidentales disfrutan de ventajas que los no-blancos no experimentan, como "un paquete invisible de activos inmerecido ". El privilegio blanco denota ventajas pasivas tanto obvias como menos obvias que los blancos pueden no reconocer que tienen, lo que lo distingue de los prejuicios o prejuicios manifiestos. 
McIntosh, connotada y reconocida feminista, bautizó el término (específicamente contra el hombre blanco) en su artículo "Privilegio blanco, desempacando de la mochila invisible" (1989), donde enumera 26 artículos "invisibles" dentro de la mochila. 

¿Qué paquete invisible es este? Lo invisible no puede verse, luego no puede adjudicarse (no sé por qué presiento un enredo de oblicuas metáforas). 

McIntosh afirma: "el privilegio blanco denota ventajas pasivas", es decir, prebendas que los demás no pueden disfrutar. Sigue la pregunta: ¿Cuáles son? 
... incluyen afirmaciones culturales de valor propio; la presunción de un estatus social mayor y la libertad de circulación, compra, trabajo, juego, y hablar libremente. El concepto de privilegio blanco también implica el derecho a asumir la universalidad de las propias experiencias, marcando a los demás como diferentes o excepcionales, percibiéndose a uno mismo como normal.
Veamos estas ventajas pasivas una por una: 

1. La feminista describe lo que ella llama "afirmaciones de valor propio", es decir, lo que llamamos VALÍA de alguien (en inglés, self-worth) que se traduce al español como auto-estima. Es como decirse uno para sus adentros: "yo valgo" o "merezco respeto", o expresar públicamente el desacuerdo ante un insulto proferido.  

¿No es la auto-estima un referente objetivo y universal? Que se sepa, ninguna experiencia asociada con la auto-estima depende de la raza de la persona, sino de su HUMANIDAD. 

¿No se da cuenta McIntosh que tratándose de la auto-estima no hay diferencia entre un blanco y un no blanco? Claramente no tengo más ni menos auto-estima porque sea rico o pobre, alto o bajito, viejo o joven, enfermo o sano. ¡Qué locura!  

2. Lo mismo con el siguiente punto. ¿Desde cuándo acá es la "libertad de movimiento" o el "comprar" algo, o el "hablar libremente", una prebenda inmerecida de los blancos? 

"Hablar libremente", o tener "libertad de movimiento" es algo que cualquier desea, que debe tenerse. Me pregunto, ¿no estará Peggy McIntosh confundiendo privilegios con derechos? 

Facultades y obligaciones que derivan del estado de una persona, o de sus relaciones con respecto a otras. Por ejemplo, los derechos humanos.  
Lo que McIntosh entiende como prebendas del blanco son simples DERECHOS UNIVERSALES –definidos, qué ironía, por un blanco de la élite inglesa, llamado John Locke, en su Segundo Tratado sobre el Gobierno Civil, 1649. Para Locke, la libertad, la autonomía, la propiedad y la búsqueda de la felicidad no son dádivas. Él los llama "derechos naturales", porque vienen con uno de nacimiento. Sin esos derechos CARECEMOS DE HUMANIDAD.  

Hasta 1649 no se había dicho algo así. El ideal abolicionista en Europa y la América del siglo XIX parte de ese argumento. Hoy nos parece diáfano (no así para la conocida feminista).

3. Otro punto interesante discutido por McIntosh es la "universalidad de las propias experiencias".  

Es obvio que las experiencias del ser humano van de lo individual a lo universal. Se debe a que vivimos en sociedad. Cuando uno dice: "Hace mucho calor aquí", espera que los demás asientan. Cuando se afirma: "La novena sinfonía de Beethoven es la mejor sinfonía jamás escrita" o "Julia Childs es la mejor cocinera de la televisión de EE. UU", uno da por sentado que dicha evaluación es no solo de uno sino además– de cualquiera.  

Fue Immanuel Kant quien dejó claro en Crítica del juicio (1790), que cada vez que apreciamos algo apelamos implícitamente al sensus communis (o sentido común). Vivimos siempre en una comunidad de SERES HUMANOS, lo de todos, lo UNIVERSAL.

4. Entre tanto, el "paquete invisible" en la mochila de McIntosh permanece intocable. Ha condenado al blanco, homo ignoramus, a no darse cuenta jamás de los privilegios que disfruta. 

Volvemos de nuevo al entramado del unconscious bias.  

El blanco no puede ver su privilegio porque es invisible, y es invisible porque no puede verlo. ¿Me explico? 

Invisible para el blanco, no para McIntosh, otra blanca por cierto. ¿Blanco en blanco?

¿Y cómo puede la blanca McIntosh percatarse de su privilegio? 

Ah, ¡porque ella es una iluminada! Su discernimiento la hace pervertir sus derechos humanos y convertirlos en privilegios raciales.  

¡Y lo peor de todo es que esa señora sea capaz de convencer a tanta gente de su desatino!

2 comentarios:

Il Pensatore dijo...

Al parecer, o al menos así lo creo, toda esta lista de predicadores del espurio (bien dicho) mito del “White privilege” han descubierto temprano la UTILIDAD y lo adherente o contagioso de la corriente, apelando a la intrínseca propiedad compasiva del ser humano. El Mal es obvio, pero el desinteresado interés por el bien de los demás, puede ser difuso, nebuloso, utilitario, inflamatorio, pegajoso y impreciso. Como ser humano, no de la etnia de origen africana ni “blanco”; confieso mi dificultad para sentir la realidad de lo que experimenta una persona, de la cual no se calzan sus zapatos. No es que sea insensible a ello; pero por lo demás incluyendo a esta Macintosh, la idea me parece más allá de una hipocresía pseudointelectual, utilitaria, retorcida y esencialmente separatista de un mito-teoría que no merece leer o atender. Precisamente es de una aparente concesión o prebenda, que debería ofender al supuesto “beneficiario”. A pesar de Castro, las revoluciones no solo entrañan destrucción de los “privilegios” de algunos; sino de los intereses de todos, de los derechos y aspiraciones de todos, sumiéndonos en un resultado de miseria compartida de la que pocas veces hay reverso, tan profundo es el legado de esas “revoluciones.” Son destrucción por la destrucción misma, de cierta manera emulando al “Arte por el Arte” pero con consecuencias nefastas, sangrientas e inútiles. (APLAUSOS) Lol 😊
“La explotación del hombre por el hombre” “la guerra de clases” “el hombre lobo del hombre” hacen todo lo posible no por arreglar nada, sino por confrontar y destruir por ende. Blanco, no blanco, privilegio, ventajas inherentes, prejuicios manifiestos, no justicia, no paz… Como siempre bien dicho por Triff: “paquete invisible”, “oblicua metáforas” y “afirmaciones culturales” sacadas de la manga y de los obscuros recovecos de sus cerebros culpables, quien sabe de que trauma. Convencimiento en contra de su febril desacierto imaginativo, de su descalabrada e intricada aventura especulativa que aparece por todas partes debe ser, lista de senadores de origen africano en el senado y en posiciones de relevancia en el gobierno, de exitosos empresarios y de millonarios deportistas, músicos y artistas de origen afroamericano. Ben Carson cita: “Success is determined not by whether you face obstacles, but by your reaction to the them and if you look at these obstacles as a containing fence, they become your excuse for failure…. Yo, como inmigrante hispano, solo vi delante agradecido las oportunidades, y nunca permitiría que las elucubraciones divisivas y ansias de poder de esos monigotes intelectuales o políticos me usaran para sus macabros propósitos.

Alfredo Triff dijo...

A pesar de Castro, las revoluciones no solo entrañan destrucción de los “privilegios” de algunos; sino de los intereses de todos

Qué bien dicho Pensatore, gracias por tu comentario.