lunes, 2 de octubre de 2006

Matarlos


Eslinda Cifuentes

Es una noche calurosa y el sopor en el barrio afea las fachadas; pero los aires acondicionados disparados en este restaurante no se justifican. La ventolera artificial sopla en mi cabeza; el frío cala y congela, sudan gélidos los cristales al chocar contenidos por el calor afuera. Me invade la vergüenza, el asco y el desprecio. Las mesas inundadas por gordos que consumen sin conmiseración, suicidas de la inmundicia (morirán ahogados por la grasa acumulada en sus cuerpos). Mis vecinos en la mesa continua me atormentan. El gordo grita porque no sabe hablar y su mujer resopla entre plátanos fritos, congrí y masas de puerco fritas…baja las cantidades que se le atragantan en el pescuezo (cuello tienen los niños y las doncellas), con batido de mamey y entre soplido y soplido hablan mierda a borbotones. Entierra sus uñas postizas en el pan con mantequilla sin percatarse que su arduo corazón trabaja el triple en inútiles funciones. Lo peor no es que sean gritones (me suenan los oídos y me pregunto que me trajo aquí), lo peor no es que coman como animales, que eructen, que se tiren peos espantosos e inevitables, lo peor no es que yo sepa que cagarán gigantescos mojones de carbohidratos (la grasa que ingieren se queda allí en sus masacrados cuerpos); lo peor no es que sus mentes sean aun más nocivas que sus cuerpos, lentas y opalinas como las digestiones interminables, dilatadas y ruidosas. No. Lo peor es que carecen de misterio. Si supiera que no me iba a sentir culpable después los mataría con un extintor de gas. Y caminaría diáfana y pura entre sus amontonados cuerpos voluminosos, sobre la miseria atroz de sus imbecilidades diarias, de sus intempestivos gritos, sus risotadas ruidosas, sus letales juicios y animaladas. Soplo mi sopa y empaño la mirada, refugiada en mí misma, o tal vez en la dignidad impecable de la llovizna contra el vidrio.

8 comentarios:

La Mano Poderosa dijo...

Did you leave a "tip"?!

Anónimo dijo...

Yo comi en un lugar similar el Sabado!

En este sitio, aparte de los gordos gritones y maleducados, habia una rocola compitiendo con seis (6) televisiones transmitiendo un partido de futbol (Bilbao vs. Barcelona). La comida? Ah, pues bastante mediocre. Y porque fui? Pura curiosidad. El lugar abrio hace dos semanas.

No pienso volver.

Alfredo Triff dijo...

Eslinda hay lugares en Miami que corresponden a esa descripcion... La Carreta por ejemplo?

machetico dijo...

A mi, por ejemplo, me acosa dia a dia la jamazon mantequera. Los que me conocen, saben que tengo muy cerca a los "in laws", que son, sin discusion alguna, los kings de la calnepuelco en el sur del condado. Me cubro y me defiendo con largas ausencias y sofisticadas esquivaciones. Anyway, a veces me entarabillan un domingo que otro y me regreso triste, a rumiar mi colesterol entre las brumas de mi veguero de recamara. Os Abrazo.

Un saludo especial a mm, de quien una amiga comun me hablo maravillas sinceras frente a su peluqueria.

La Mano Poderosa dijo...

About the illustration;

Title:Allegory of Gluttony and Lust
Oil on Wood, 31 cm X35 cm
New Haven,Yale University,CT. Art Center.

Painter:
Bosch, Hieronymus, or Jerom Bos (hērôn'ĭməs, yā'rôm bôs)
c.1450–1516, Dutch, Flemish painter. His surname was originally van Aeken; Bosch refers to 's Hertogenbosch, where he was born and worked. Little is known of his life and training, although it is clear that he belonged to a family of painters. His paintings, executed in brilliant colors and with an uncanny mastery of detail, are filled with strangely animated objects, bizarre plants and animals, and monstrous, amusing, or diabolical figures believed to have been suggested by folk legends, allegorical poems, moralizing religious literature, and aspects of late Gothic art. Such works as the Garden of Earthly Delights (Prado) appear to be intricate allegories; their symbolism, however, is obscure and has consistently defied unified interpretation. Bosch clearly had an interest in the grotesque, the diabolical, the exuberant, and the macabre. He also may have been the first European painter to depict scenes of everyday life, although often with a strong element of the bizarre.
King Philip II of Spain collected some of his finest creations. The Temptation of St. Anthony (Lisbon) and The Last Judgment were recurring themes. Other examples of his art may be seen in the Escorial and in Brussels. Examples of the Adoration of the Magi are in the Metropolitan Museum and in the Philadelphia Museum, which also has the Mocking of Christ. Bosch, who deeply influenced the work of Peter Bruegel the Elder, was hailed in the 20th cent. as a forerunner of the surrealists, and his work continues to influence many contemporary artists. Bosch, who had many imitators, signed only seven of his paintings. Over the years, scholars have attributed to Bosch fewer and fewer of the works originally thought to be his, and by the beginning of the 21st cent. only 25 to 30 were definitively ascribed to him.

jr dijo...

La mediocridad puede hacerse más gorda o más delgada pero difícilmente puede dejar de ser mediocridad aunque se encarame en un altar. Según Einstein "lo más bello que podemos experimentar es el misterio de las cosas" y de esa virtud silenciosa es que carecen los mediocres. Pero, Eslinda, también ellos tienen derecho a la vida. Tal como nuestra anatomía, por muy aseados que seamos, alcanza la fetidez del uso, de la misma manera es el mediocre a la sociedad su parte más prosaica. Pero, aún digo más. Saquemos el por ciento de lo que nuestra propia biografía se desperdicia en medianías. ¿En qué territorio quedamos entonces? ¿En la mediocridad o en el misterio? Seamos honestos al respondernos.

La Mano Poderosa dijo...

Eslinda,
Mejor ir a un buen restaurant, uno costozo. Si comes en San Michel en Coral Gables, te sirven poco, te cuesta mucho, el ruido no existe, por la calidad y un publico mas educado. Despues de un buen vino, camines por Miracle Mile para quemar las 3 calories que te costaron $90.00... Y regresas a tu casa mas relajada.

Alfredo Triff dijo...

"Matar" fue solo una metafora. No, Eslinda?