martes, 20 de noviembre de 2007

Crítica de la calor pura


Andrés Reynaldo

Amanece de invierno. Despierta en mi carne la arcaica memoria del norte. A fin de cuentas, si somos agua, nuestra inmediata potencialidad tendría que ser el hielo. El aire huele (¿o deseo que huela?) a lejanas violetas, a frágiles hogueras. Comienzan en el jardín las domésticas migraciones. Hambrientos pájaros escarban entre los canteros. El gusano se zambulle en una tierra todavía tibia; tres pulgadas en cualquier dirección lo acecha el abismo. El trópico corrompe nuestros ciclos. A cien grados Farenheit a la sombra, sobreviene en nuestras células el terror al movimiento. Terror a la evaporación. Entonces, puesto que hemos renunciado al viaje, se nos olvida hibernar. Resurrección a medias. El cuerpo reconstituido en una apresurada partitura. Sueños que no alcanzan a curarnos. Nada se sostiene en su imagen. Las raíces emprenden la fuga hacia la superficie. Es la temperatura de los espejismos. En París, César Vallejo se ponía el abrigo no porque estuviera nevando sino para que empezara a nevar (El poeta que ejerce sus poderes chamánicos). Abro la ventana en Miami para ver al bisonte sobre la nevada pradera y escuchar la exacta fragmentación de la luz contra la roca. Mi aliento se condensa en afiladas espirales. Habría que guardar las más fuertes semillas. Algún día volveré a ser nómada.

32 comentarios:

JR dijo...

Hay amaneceres así, que se levantan con esas utopías invernales, sobre todo cuando uno se satura de trópico. Pero tu final, Andrés, es el que me fascina: "algún día volveré a ser nómada"... evocación de una libertad perdida entre el neón y el asfalto. Bienvenido a Tumiami, Andrés, un abrazo.

Unknown dijo...

Guau....bello. Adoro la nieve y me encantan las violetas.
Si eres el Reynaldo del Nuevo Herald, queria decirte que soy lectora tuya de hace mucho tiempo...me gusta tu forma poetica de decir las cosas.

Bienvenido (:

La fe dijo...

Andres: Post poetico como todo lo tuyo. Bienvenido. Yo tambien soy lector fiel.

MC dijo...

Las raíces emprenden la fuga hacia la superficie. Es la temperatura de los espejismos.

me encanta.

Feminista dijo...

Por qué siempre añoramos otro Miami distinto al de la realidad. Yo viví en el norte demasiados años, por lo tanto prefiero la calor. Enhorabuena Arnaldo.

Unknown dijo...

Reynaldo: Vacilo mucho tu onda y te doy la bienvenida.

machetico dijo...

Notifico reciente ingreso, según Artes y Letras del Jeraldo del domingo que la sección cubana de la asociación de orates artistas (grupos, fragmentaciones para ser algo en algún lado, la consabida cabeza de ratón) que hace rato asuela ojos y galerías-galeras, ha recibido el valioso ingreso de Peyi Rodríguez, veterano dipsómano gráfico, al parecer ya por fin diagnosticado institucionalmente, tras décadas de constantes performances injustamente tomadas como simples papelazos alcohólicos. Abstraccionista portocarroñero de enrevesada poética viboreña, le irá muy bien en esta senda loca, siempre de la mano parkinsoniana de la simia versificadora que lidera tal insana claque.

boniato dijo...

que animal tan fuerte el bisonte...........cavila boniatillo mientras lee sobre el verano que quiere ser invierno....................pero MIAMI esta un poco mas fresco verdad?
ya que todos le dan la bienvenida al gran periodista ANDRES REYNALDO boniatillo tambien.

yo se que el escrito es muy poetico pero aqui nos caemos de nalgas en el pasto verde y no en la nieve...................ji!

Anónimo dijo...

Me gusta vivir (y sufrir) las cuatro estaciones del anio en mi ciudad.

Alfredo Triff dijo...

Wilkomenn Andres. Mis momentos mas promotedores llegan con el oton~o y se asientan en el invierno.

Alfredo Triff dijo...

Inkie: Chicago has four seasons. We, at best, have three.

Anónimo dijo...

Si, Alfredo:

70 = Otonio
90 = Primavera
110 = Verano

jeje

I still want to live there someday... And I shall... :)

Adal dijo...

es de costumbre para algunos (muy normales,) sacar la ropa de invierno del closet (o escaparate,) para convidar al frio. cesar vallejo, lunaticamente o chamanisticamente, invitaba la nieve. los dos conceptos me parecen geniales. eso si, en miami sobran los abrigos y falta ese viento frio con agua que se congela bajo nuestros pies y nos hace patinar. el hielo hermoso y resbaladizo. que linda es la nieve, como se resbala en el hielo! siempre invoque a los poderes climaticos a que nevara en la paloma. solo consegui viviendo en el palomar, se me ofreciera un viaje ligado a una pincha de lavaplatos en las montanias de nueva york, donde existe la nieve en grandes cantidades. nunca llegue ni a la pincha ni a la nieve. anios mas tarde, me toco conocerla frente a frente o (dandome en la frente) prefiero nuestro clima.

Adal dijo...

rei...aunque no creo conocerte, te felicito por este post y espero leer muchas cosas tuyas aqui con mas frecuencia.

Unknown dijo...

Inkieta: Se te fue la mano.Aqui no hay veranos de 110.

ABREQUEVOY dijo...

Me quedo con el verano y me sumo a la bienvenida.

Unknown dijo...

miro al cielo
lejanía inviolada,
misterioso país de formas
ensueño y distancia
niebla azul
abundancia
la pradera mágica,
música de besos y palabras;
llega la primavera extenuada,
para palomas y palmas

Unknown dijo...

Con Reynaldo o sin Reynaldo, en este blog se empeñan en darle respiración artificial al buey, digo al bisonte de Miami.

Unknown dijo...

Hola: Gracias por la bienvenida. Me gusta el espiritu del blog. No podia ser menos teniendo a quien tiene de editor. Cada dia me gusta mas Miami (a pesar del verano)por esta incipiente y prometedora primavera de la inteligencia, el buen gusto y, no menos importante, la sed de hacer cosas interesantes (entiendase como quiera!)de tantos amigos viejos y nuevos. Un saludo a todos y gracias por leerme.

Amilcar dijo...

La poética del invierno nos coge siempre desprevenidos. Algunas veces ocurre al salir de la ducha en una mañana de noviembre. Otras cuando los dátiles del medio oriente aparecen frescos en la tienda. O, simplemente, cuando decides dejarte la barba debido a la frialdad de la madrugada.
El ganador del Premio Cervantes de este año, Antonio Gamoneda, tiene un libro que se llama "Las edades del frío" y uno de sus protagonistas poéticos es "El vigilante de la nieve". Una buena recomendación para tu literatura: buena prosa poética, nieve fresca, paisaje castellano y un toque de surrealismo bajo el influjo del campo.

Un abrazo y bienvenido al blog

Amílcar

Un ignorante de pacotilla dijo...

Sea bien recibido Reynaldo. Y me incluyo como otro lector de sus columnas.

Blues(y)son dijo...

La llegada del mono nos pone poeticos..

JR dijo...

ay, amilcar, que bonito tú escribes...estoy hasta suspirando...

Cara dura dijo...

La verdad no entiendo esa defensa a ultranza de Miami. El senor Reynaldo tiene el derecho de expresar su opinion y yo la mia aunque viva aca: No me gusta Miami.

dolphinviajero dijo...

Chamo, ¿POR QUÉ NO TE CALLAS?

Unknown dijo...

Querido Andrés, recuerdo un potro bajo la lluvia en uno de tus bellos poemas. Ahora fijo ese bisonte en la nieve de un Miami hipotético, plausible. Me sumo al coro de bienvenida.

Alfredo Triff dijo...

Dolphin: Te la comiste!!

Artdrives dijo...

Reynaldo, esta vez del otro lado de una puerta que no existe. Leo periódicos sólo de paso por la gasolinera, así que por aquí te veo la mejor de las caras, la de la escritura. Un post de metamorfosis por medio de la mirada para un blog como la mar, un gusto verte navegar.

mantilla dijo...

bienvenido al blog,Reynaldo.Yo te sigo siempre en el periodico

Unknown dijo...

CRITICA DE LA CALOR
CALOR DE LA CRITICA
CRITICA DE LA CALOR
CALOR DE LA CRITICA
CRITICA DE LA CALOR
CRITICA DE LA CALOR
CALOR DE LA CRITICA
CALOR DE LA CRITICA

jm dijo...

Maestrazo, gracias por compartir en este imprescindible blog ...
Será un placer leerte en cualquier época del año...

jm dijo...

Maestrazo, gracias por compartir en este imprescindible blog ...
Será un placer leerte en cualquier época del año...