Rosie Inguanzo
Foto: Pedro Portal
Estreno la mirada, soy la niña que levanta una piedra en el jardín del cielo. Leo nubes (son parlanchinas) –tanto articulan las nubes desde lo tácito que huelga el parloteo infeliz de las gentes aquí abajo. Leer las nubes. Leer en las manchas de humedad en los vitrales interiores de un templo romano. En un muro de mi ciudad el graffiti con el que un desconocido cifró un mensaje para una. Leer el dolor de unos ojos.
Leer en los balbuceos del dictador, su recodo siniestro.
Leer por idolatría a las palabras, desmenuzándolas: el sentido y la alegría de nombrar, como por primera vez, algo. Leer filigranas. Mapas y paisajes. Leer cicatrices, arrugas, tatuajes, lunares. Que el rostro valga la pena una lectura. Leer posturas. Leer mentes.
Leer la borra de café. Leer las máscaras africanas en la sala de la casa, ya trae un mundo. Leer –formular con palabras para amilanar el escarnio. Palabras para expresar la dilación de la infamia que se ha infligido a nuestra especie. Leer todo lo impreso: etiquetas, maripositas chinas, la fecha en el recibo, el mensaje en la botella, diarios, blogs, facebook, tweets. Minucia que al final del día debilita. De ahí la costumbre de voltear las botellas de champú, los detergentes, los títulos del librero, los envases de comida, esconder potes, fotografías, referencias, enrollar pergaminos, minimizar el decorado, mientras todo habla todo el tiempo, y hemos de aliviarnos de la semántica ininterrumpida.
Y volver a las nubes —que alivian del exceso de significados, leyéndoseles con los líos de la imaginación. Nubes que son las cintas sueltas de la memoria. Imagen diacrónica del enunciado. Vapores pictográficos, las nubes. Aguas que van por el aire. Perplejidad prehablada. En ellas un sentido que atrae como un perfume, como si algodones de azúcar que se derriten en la boca de la mirada.
Bello, Rosie. Estoy seguro que el flaco besó cada una de esas palabras...
ResponderEliminarLa imagen de Pedro es impecable. Ojo con la manera en que son capturadas por el lente las variaciones de tono de un azul que casi hiere la mirada
ResponderEliminarLiiiindoo,Rosie
ResponderEliminar¡Qué crítica, original, y perversa inocencia! Jajajaj. Tu prosa es un chorro que dispara al lugar menos esperado, vital muy vital. Gracias, saludos.
ResponderEliminarJudith . G
Me gusta muchisimo Rubia Bella!
ResponderEliminarRI, hace unos días alguien comentó --en FB-- esto de ti a propó de tu eslinda desbordada meneando colchones en un performance (cosa que me encantaría presenciar): "...pq tú en ese papelito , con tu flotar y tu finura...". me quedé pensando que eso es precisamente lo que me llevé de ti la vez que te conocí, tu flotar y tu finura. y este texto lo indica. no es difícil imaginarte leyendo nubes. yo hasta te imagino volando entre ellas, vaya. y mirando hacia bajo con mucha lástima, con esos ojos claros de tigresa que sabe a quién va a arañar y morder, cuando tenga que hacerlo. dale, que vapor con vapor se evapora.
ResponderEliminarRosi es un poema en prosa bellisimo, digo, en rosa. MI
ResponderEliminarBello.
ResponderEliminarMe gusta, Rosie.
ResponderEliminar(patada lateral)
gracias amigos, sus comentarios me hacen sentir muy reconfortada. bisou
ResponderEliminarsonorita, querida, nadie estA hecho de una sola pieza ;->
ResponderEliminarGracias querida y preciosa amiga. Te besa el presidente de tu club de fans cubano en Madrid. Alberto Lauro
ResponderEliminaralbertico lauro, poeta, te devuelvo el carin~o duplicado. RI
ResponderEliminarHay algunas reminiscencias de O.Girondo x ahí...Llorar a lágrima viva.
ResponderEliminar...pero sí, un buen texto.
Es muy lindo leerte a ti tambien Rosie, gracias por enviarme el link.
ResponderEliminarbesos miles,
Dinorah
Increíble...no lo había leído hasta ahora, un besito
ResponderEliminarAmílcar Barca
Rosiña mía que lindo, si no lo hubieras escrito sería nube!
ResponderEliminarTeresa