Tumiamiblog
En su Principia Ethica (1903), el filósofo británico G.E. Moore nos pide imaginar dos mundos: uno absolutamente bello y otro que es exactamente su opuesto. Desde la óptica de Moore resulta obvio que la primera opción es mucho mejor que la segunda. Quisiera reelaborar el experimento e imaginar el mundo de la revolución de enero de 1959 que nos tocó vivir, con sus multitudinarias convocatorias, la voz varonil del líder por el micrófono, la adoración mayúscula, sus largos años de insensatez. Ese mundo acaeció como resultado de individuos que lo anhelaban como la realización de los mejores ideales de nuestra historia. ¿Cómo puede ser que nadie desee un mundo así? No lo habían vivido aún, se diría. ¿Quién en su sano juicio desearía retrotraer la historia a enero 2 de 1959? Pero no hay contradicción alguna en desearlo de nuevo. Esa misma multitud daría cualquier cosa por revivir “la razón” del momento, el absurdo misterio de su error, su por qué. Ese sueño de la razón que produce monstruos.
Esa ultima frase es bellisima.
ResponderEliminarQue...? Soy la unica trabajando hoy? Donde andan?!
Feliz Anno. Estoy de acuerdo, el ser humano es el unico animal que tropieza dos veces con la misma piedra. Que destino el nuestro...
ResponderEliminarInkieta. Hoy te me adelantaaste.
At, la idea esta buena , pero merece mas desarrollo, creo que te saliste manera muy "caprichosa" .Por alguna razon este planteo filosofico de lo bello -bueno, revela mucho de el relativismo moral al que estamos expuestos y del que somos (los intelectuales ) responsables, al ser los encargados de traducir e ilustrar la imagen del poder.
ResponderEliminarEnemigo: Cierto es un planteamiento tentativo. Pero la explicación está implícita en el texto. Que la historia se repita no viola ningún principio lógico. Necesitamos hacerlo porque sería muy duro admitir que fuimos nosotros, y no un accidente la causa del fracaso de nuestro mundo presente. Retrotraer la historia tiene además el poderoso gancho de volver a vivir el tiempo perdido.
ResponderEliminarQue la gente va despertando poco a poco del guayabo. Alguien dijo quela historia se repite y que la segunda vez es como tragedia.
ResponderEliminarel pasado NO se repite, se repiten los errores humanos. no somos tan listos como parecemos, cometemos los mismos errores una y otra vez, y eso hace que la historia se repite…
ResponderEliminarDemasiada clara para mí la relación causa-efecto a estas alturas como para no entender que este ciclo está propenso a repetirse con características semejantes y consecuencias equivalentes. Es natural en la evolución del genoma nacional, con sus ADN aberrados desde el desembarco de Colón. ¿Quién en su sano juicio no está seguro que se repetirán las multitudes fanáticas y el absolutismo mediático? Pero si la historia se contradice, no por asombroso tiene que interpretarse como ilógico. Ese error de presunción puede -y me refiero a la falta inesperada de redundancia- cambiar la orientación absurda del misterio. Claro, ya estaríamos hablando en términos poéticos de un contrasentido monstruoso de la desesperanza. Prefiero viajar al 2 de enero del 2009, al envejecimiento del error. Revela como todos los antiques algo de rara belleza.
ResponderEliminarEl problema es que esa pregunta es muy dificil. Pasemos a otro capitullo.
ResponderEliminarTriff eso esta muy bueno...................dice boniatillo arrascandode la barbilla.....................como se cambia de parecer con el tiempo..............................cambio el modelo y nos queadamos jodidos muchosssssssss an~ossssssss despues de que se cayera la torre de naipes.
ResponderEliminarLa misma pregunta que te haces ya se la ha hecho cuanto cubanologo existe. La idolatria del pueblo, y despues la indolencia de los intelectuales. El nivel de chivateria.
ResponderEliminarQue paso? Como se enganaron?
La equivocacionde Raysa es separar la historia de los hombres que la hacen. Creo que los hombres hacen la historia porque no hay historia sin humanidad.
Es ciero feminista, pero cuando la tragedia se repite por 50 annos, sin duda se convierte en comedia. Aclarando siempre que en el caso cubano no una "divina comedia" sino algo mucho peor y menos sublime.
ResponderEliminarSaludos
Geandy
La historia sin el hombre (o sin la mujer) es como decir (sin caer en solipsismos baratos) Habra belleza sin la mente que la concibe?
ResponderEliminarHay dos teorias de la historia, una dice que esta se forma a partir de grandes hombres que cambian el mundo, como Alejandro, César, Pedro el Grande y otra que nos dice que los cambios se van dando no impulsados por el hombre sino por la misma sociedad que evoluciona y crea ese devenir. ME INCLINO POR LA SEGUNDA.
ResponderEliminarNo hay tema políticamente posible después de escuchar a Frank Emilio y su Cuban Jazz Combo (circa 1958) acompañado con Chateauneuf de Pape 2000, con Barreto, Papito Hernández y el Tata.
ResponderEliminarMúsica en sí -y para sí-, weltanschauung haba+nero......
Scherezada, magia de la noche.
1,2,3 probando............algo mas grande e importante que killing time se esta cocinando en un conocido museo de Nueva York.......y esta vez parece ser mas selectiva la cosa. la mayoria se queda fuera y solamente seran doce los apostoles.
ResponderEliminarestos pasaran a la historia como los "performers" de la isla,...........quienes seran los elegidos para el team Cuba?
seran de aqui?...seran de donde son los cantantes?
EL INFORMANTE
"CUIDAO" CON EL CONDE QUE MUERDE "CALLAO"
ResponderEliminarEl pasado no es un buen sitio para nadie. La Historia, sin embargo, ofrece lecciones que casi nadie aprende.
ResponderEliminarSi el emperador Constantino --que se autodenominaba el 'tertius decimus' apóstol-- no hubiese instituído el cristianismo como religión oficial del Imperio Romano, seríamos mitraístas. Los domingos, digamos, buscaríamos cuevas donde matar un toro y mancharnos el cuerpo con la sangre del sacrificio en lugar de celebrar la consagración en misa.
¿Qué es el desenfreno de la turba cubana en 1959 comparado a la determinación de Constantino? Casi nada.
Justo en ese momento, AT, yo escuchaba cierta descarga de Marta Strada. Gato Tuerto, hechizo de la madrugada. Nada, que andábamos por el mismo barrio sin saberlo
ResponderEliminarCada un ciclo incierto, también llamado revolución (que mecanicistas y positivistas intentaron predecir sin mucho fruto), las grandes masas en su espiral producen el vórtice que las hace girar, el líder. Ambos, multitud e individuo son aquellas piedrecillas pensantes emocionalmente inestables y manipulables que se agitan en la creencia de poder doblegar la naturaleza, la sociedad y el curso de lo absoluto impensable, de aquello que genera la totalidad del torbellino, el gran manipulador del tiempo sin historia y de la belleza sin mente ni corazón que la conciban.
ResponderEliminarHay un tiempo para la ilusión y otro para el darse cuenta o desengaño, en ese intervalo viven todas las democracias, dictaduras y revoluciones en las que podamos girar o soplar. Todo poder está contenido en otro poder hasta llegar a ese punto en el que la lógica ya no cuenta.
Sé de un Pitágoras explicando a sus discípulos cómo era muy probable que otra vez todos ellos estuvieran allí en otro tiempo mientras él iluminaba con su laser pointer el pizarrón cubierto de formas helicoidales. Claro, si todo se detiene al otro extremo del impulso inicial y la cantidad de lo que existe es suficiente para atraerse, quién descarta que tal proceso multimillonario no ocurra hacia el mismo punto inicial, con altísimas probabilidades de re-desplegarse todo de manera idéntica por una suerte de memoria genética de la materia. Esto haría del universo un latir sin fin para el que bien vale no tener memoria.
Moore, hubiera escrito more sobre mundos imaginarios de haber tenido tras de sí la T.G.R, a Lobachevsky y a Hopkins. Ahora sabemos que el improbable latir sin fin del universo permanece amenazado por algo invisible aunque sí deducible: la materia que devora materia. De modo que una vez llegada la muerte térmica del universo la oportunidad de reagrupamiento (dada por la fuerza de atracción universal) queda abolida al no existir la cantidad de masa suficiente que pudiera vencer la distancia y el frío. Nada, que estrellas caníbales trabajan para lo vano, también conocido como la nada.
ResponderEliminarInformante , infórmate: es un mundo de vanidades: Ni Killing Time, ni N.Y ni Cuba, ni los pobres museos siempre dormidos en su refrito , siempre con sus cocos comidos, son tan grandes ni importantes. Los apóstoles perdieron la misión antes de comenzarla. El arte y la religión intercambian todo el tiempo sus máscaras detrás de las cuales no es difícil adivinar el vacío mismo.
Conde OK.
Esto se puso bueno. UIDP y Jack las tiran duras y el Nilo entró en talla. Creo que ya se puede fundar la Cátedra Bertrand Russell en Tumiami.
ResponderEliminarAunque no habrá de tener las mismas consecuencias que el día aciago del que hablábamos, en los EEUU se va a escoger un líder en base, mayormente, a mentiras bien urdidas. El marketing nació de la propaganda.
ResponderEliminarPor cierto, AT, tu presentación está bien pero, por favor, no me digas que el líder tenía la voz 'varonil'. Me parece acertado decir que la razón ebria produce monstruos. Yo también sé de muchos divorcios.
Jack: En La Habana de la época se hablaba de las mujeres enamoradas ante el cristo barbudo... tienes razón con "la razón ebria".
ResponderEliminarNi-lo pienses de esa manera, El que es un mundo de vanidades es este blog,.....bla bla bla y mucha teoria, (sobre todo citas para demostrar el grosor de la biblioteca que hay en mi casa)......pero eso no transciende.
ResponderEliminarla revolucion cubana cumple 50 y su amo mas de 80.
(eso es un hecho),
los hechos son reales,
NY es una ciudad tangible igual que cuba con su revolucion y los pobres museos siempre dormidos en su refrito.
Al final a quienes no se les hace caso es a los intelectuales con su tipica critica sentados en un comodo sillon.
gracias mi amigo pero el exceso de informacion inutil y el regodeo del egosapiens son mas malos que un show que va a abarcar 100 artistas latinoamericanos que han incursionado el performance,(after killing time) en la cual solamente estaran los 12 mejores de la isla.
Otra vez KILLING TIME?.....NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO
ResponderEliminarF. Castro era un intelectual, gústenos o no. Había leído mucho. Manejaba las ideas. De sus lecturas, aunque mal digeridas o interpretadas con prejuicio, brotaba la verborrea que sedujo a la masa.
ResponderEliminarLas masas jamás han sido más listas que sus propios individuos. Con tal de adorar, adoran a un insensato (A.T.). En Miami, adoran a los protagonistas de las telenovelas.
Hitler y Stalin hablaban bien. Eran soberbios también y tenían opiniones infladas de sus respectivas personas. Pero Alemania y Rusia eran vastísimas y poderosas. Cuba...
Los que sabían en 1959 que nuestro engreído compatriota se las daba de saber mucho, pero que no era economista, ni estadista, ni agricultor, ni científico, ni industrial, ni administrador, ni guerrero, primero rieron y luego se asustaron. Acabaron por tener que callar o emigrar. ¿Quién se atrevía a contradecir una masa con tanta fe?
Jack, creo que ese comentario lo hiciste para el post de hoy jueves.
ResponderEliminarInformante, no tengo sillón. Sentado sobre mi obrar-elefante, lanzó la flecha a un blanco que gravita sobre las cabezas de los intelectuales, no me siento uno de ellos, sólo conozco sus constituciones mentales y me comunico.
ResponderEliminar¿A la hora de escoger apóstoles a quién le haces caso me dices? Me temo que esa carcoma mesiánica aportó ya bastante a la cadena de disparates de la islita.
Recuerda que el todo va en la parte y que si te pegas demasiado al terroncito mental del campo artístico que te tocó y su "ahora sí que sí", te pierdes el viaje grande, el de polvo de estrellas del plan mayor.
Evidentemente lo que haces no fue a K.T, ni a lo de los cien o doce performers pero alguna esperanza de trascendencia te quedará cuando publiquen el volumen de once páginas “Ligera historia del arte cubano y el dato suelto” en una de estas vueltas. Conozco de minimizadores menos altisonantes y diestros pero de más vuelo.
Aprecio tu nerviosismo adolescente, no te desanimes, arma tu rompecabezas y empieza a decir algo de una vez.
El Conde, OK, lo postularía como apostol, apostaría por su revisión aguda de las pomposerías elitistas que por otro lado lo legitiman. Arte inteligente el suyo. No Conde sino El rey del canto suelo llamarlo.