jueves, 23 de noviembre de 2006

Gracias por...


Thanksgiving es celebrar el día de la cosecha; buen momento para meditar y expresar nuestro agradecimiento. No es una fiesta religiosa aunque muchos damos gracias a Dios por las bendiciones recibidas. ¿Dar gracias? A todo y por todo lo que nos trae felicidad. Gracias por la salud y la paz... trabajo, techo, abrigo, por las personas amadas, los buenos amigos, el friesito tardío de noviembre, el sol, la playa y tú... blogolandia, Miami, el arte, el buen cine, por este país inusitado, por la paliza que le dieron al presidente, la feria del libro, la buena música, por los niños y las nobles enseñanzas, por la poesía de cada minuto, el pavo (¡y que no esté seco por Dios!), la buena literatura, los fetecunes entre amigos, la mujer, la hermandad entre la gente. Gracias por la impecable luz de esta mañana, por los parajes suizos, por el nuevo James Bond, por la memoria viva de los que se fueron, por la ducha caliente y por el vino de buena cosecha, por los viejos que como el buen vino nos enseñan a emular con los misterios del cuerpo y el añejo de la mente. Gracias por otro día más.

3 comentarios:

machetico dijo...

Feliz Thanksgiving! Gracias por tener la dicha de presenciar la agonia del despota (que sea larga...)Dicen que lo sacan el dia 2 de todos modos. Hay que tomarle fotos. Como no tengo internet, aprovecho para comentar brevemente el encuentro que todos disfrutamos con Willy Fadanelli en casa del fulgurante Galaxy Novoa, donde todos los muchachos y muchachas exhibieron sus mejores galas. El divo Garcia nos mostro un bello modelito de denim overcoat que causo las delicias de todos los amantes del facho (fashion, I mean). Aproveche tal verdadera velada cultural para recordarle a la victima que mas que mi azteca favorito es el mejor mexicano que jinetee en La Habana alla por 1990, cuando se aparecio con Yolanda y Naief a comprar cantidades industriales de obras de Lenin, editorial Progreso, supuestamente para venderselas despues a los marxistas de la UNAM y que finalmente terminaron calzando las cojas patas de sus muebles en la Colonia Ermita, cerca del metro Portales. Dieciseis anos han pasado y parece que fue ayer. Habia visto a Willy por ultima vez en Miguel Angel de Quevedo, frente a la libreria Ghandi, en la primavera de 1994 unas semanas antes de nuestro heroico surrending en San Ysidro, CA. Como ha llovido desde entonces. Denle gracias al pavo tonight.

jr dijo...

Hermoso mensaje, tumiami. Ideal para compensar todas la ingratitudes. Reconforta recordar los beneficios heredados: la montaña y la mar profunda, el pez y la mano del amigo, el pan en el corazón y la galaxia compartida. Gracias a Dios porque existimos. Y gracias a Dios por su propia existencia, por encima de parcelas religiosas, de calendarios y de ateísmos.

A.B dijo...

Con un escueto saludo de una palabra me sumo tarde

Gracias

Amilcar